Cuando el brote de Covid 19 obligó a los niños a aprender a distancia, se hizo evidente que muchas familias carecían de ordenadores. Sin embargo, la fuerza solidaria de los habitantes de Wrocław es notable. La gente empezó a donar equipos a los niños necesitados.

Conseguimos "reunirnos en línea" con especialistas en informática, que empezaron a reparar, montar y configurar equipos informáticos por la noche a partir de los componentes que los donantes proporcionaban. Como resultado, no sólo conseguimos que más de 200 niños se conectaran a la red, sino que empezamos a limpiar eficazmente hogares y oficinas de equipos informáticos usados que ya no necesitaban.

Y así se creó un proyecto de reciclaje que nos permite equipar a los niños con ordenadores adecuados para la educación a distancia.

¡Seguimos adelante!